El miércoles pasado fui a ver "Broken Flowers", la última de Jim Jarmush. Fui al Lorca. Quería hablar de este cine porque hay algo del Lorca que me atrae, yo que soy tan afecto a los tiempos pasados, cuando entro al Lorca siento como si estuviera en los 70 o tal vez en los 60. La sala de abajo, con su bajada hasta la mitad y luego una inexplicable subida de la mitad hacia la pantalla es absolutamente incómoda para ver, y como yo nunca voy atrás, al sentarme adelante me encuentro en posición de avión en despegue. De todas maneras me tocó la sala de arriba por suerte. Pero lo que me gusta del Lorca es su vejez, su aire setentista, su oscuridad. Tiene un aspecto de cine que está por cerrar, eternamente, como si estuviera por convertirse en un cine porno o en un megabazar. Yo me pregunto porque los cines no se hacen así ahora, como el Lorca, con butacas mejores, eso si. Perdón por preguntar boludeces.
Volviendo a la peli, ya había recibido comentarios del tipo "no es la mejor película de Jarmush". Y en efecto, tal vez no lo sea. Digo tal vez porque siempre me pareció estúpido juzgar como mejor o peor una obra de arte. Yo, modestamente, creo que "Strangers than Paradise" es genial. "Down by Low" es también excelente. Es probable que "Broken Flowers" no sea tan buena.
Jarmush tenía un estilo muy definido y una estética muy particular también. Creo que nadie que haya visto "Strangers than Paradise" puede olvidarse de ella. Sin embargo, de Broken Flowers lo único realmente inolvidable probablemente vaya a ser la increíble actuación de Bill Murray.
Murray es Don Jonhston, un tipo que evidentemente ha sido y sigue siendo un seductor implacable con las mujeres. En un momento de su vida donde se siente vacío, su mujer lo abandona, recibe una carta sin destinatario de una supuesta ex mujer suya que dice que ha tenido un hijo de él. Don, convencido por un vecino con afanes detectivescos, se larga a la búsqueda de las ex mujeres con las que posiblemente pudo haber engendrado el supuesto hijo.
En los encuentros con ellas, Jarmush hace gala de su humor ácido, y para esto nada mejor que los "no gestos", por decirlo de algún modo, de Murray.
Hay que decir algo. Jarmush ha elegido muy acertadamente a Murray. La historia se basa demasiado en la abulía, en el desgano, en la soledad, en la inteligencia irónicamente parca de su protagonista. Murray muestra todas estas facetas y más. No es una película cuyo argumento pretenda ahondar demasiado en la relación del protagonista con sus ex mujeres. Tal vez a esos encuentros le faltó exprimirle mucho más el jugo. Quizás la historia necesitaba más acciones, pero seguramente el estilo parco de Jarmush lo llevó a contarlo de este modo, el que probablemente no le guste a mucha gente.
La diferencia entre las dos películas que cite antes "Strangers ..." y "Down ...." y esta, sea que en aquellas las derivas de los personajes tenían mucho de sinsentido, y por ende, el estilo parco le sentaba perfecto. En "Broken Flowers" hay una búsqueda concreta: el protagonista quiere encontrar a su supuesto hijo. Y está bien que Don sea abúlico, pero no que las escenas también lo sean, en tal caso a mi me quedó el sinsabor de que debía haber pasado más. Es, como siempre digo, mi modesta opinión.
Probablemente Jarmush no perdió el estilo. Pero convengamos que hoy no podría filmar "Strangers than Paradise" si quisiera tener una mínima posibilidad de figurar en el circuito comercial. Hay clichés que no eran de Jarmush. El travelling circular del final me pareció la típica chotada yanqui que Jarmush nunca hubiera hecho, con su tendencia a los cortes secos de planos que a mi particularmente me gustan mucho, y que en este film se ven pero menos que en sus primeros. Lo salva la magnífica cara de Murray en ese final que es puro desconsuelo.
A mi me gustó la peli. Digamos que Jarmush me gusta mucho. Tal vez podría haber sido mejor, eso es verdad. Y es una pena. Pero los grandes artistas también tienen sus puntos flacos.
1 comentario:
I say briefly: Best! Useful information. Good job guys.
»
Publicar un comentario